Las vacaciones de verano son la temporada favorita de los chicos, ya que es una gran oportunidad para hacer lo que más les gusta y para descansar, sin embargo, su desarrollo integral no tiene por qué detenerse.
Los padres deben seguir acompañando a sus hijos en el desarrollo emocional, social y cognitivo, y así estar listos para cada reto del mundo de hoy. Aquí les dejamos algunas recomendaciones para que disfruten de unas vacaciones seguras y entretenidas.
1. Practicar deportes
Esta época del año es la oportunidad perfecta para empezar a practicar algún deporte. Alternativas como fútbol, voleibol, natación, básquetbol, entre otras fortalecen la disciplina, la voluntad y el trabajo en equipo, así como la coordinación y la concentración. Cada vez que un niño realiza actividades deportivas desarrolla su autoestima y su autoconcepto, ya que se siente capaz de realizar cualquier cosa que se proponga.
2. Alimentación saludable
Debemos cuidar la alimentación de nuestros hijos para que regresen a clases con energía. Es importante mantenerlos bien hidratados sin considerar gaseosas y jugos llenos de azúcar. Asimismo, debemos estar atentos a las etiquetas de los productos envasados, de manera que eviten consumir los que tienen muchas calorías, grasas o azúcares.
Los niños suelen comer lo que hay disponible en casa, por lo que debemos asegurarnos de tener siempre frutas y verduras, y así promover una alimentación más saludable.
3. Música y arte
Los niños pueden estimular su creatividad y la memoria a través de muchas actividades como pintar, tocar un instrumento musical, crear un collage, diseñar pulseras, álbumes de fotos, entre otros.
Aprovechemos Internet para encontrar cursos virtuales o tutoriales y así aprender cómo tocar instrumentos musicales o hacer manualidades. Esta es la mejor manera para que los niños expresen sus emociones, conozcan sus propios talentos y desarrollen habilidades que les permitan resolver problemas de una manera más creativa.
4. La aventura de leer
Podemos enseñarle a los niños que leer no debe ser aburrido ni obligatorio, al contrario, puede ser un momento increíble para aprender y descubrir cosas nuevas. Elegir juntos los libros será importante para que se sientan parte de las decisiones y ayudará a que la lectura sea un espacio lúdico donde se puede dialogar y compartir.
5. Siempre hay momento para jugar
El juego le permite a los niños fortalecer su autoestima, canalizar sus emociones, trabajar en equipo, tolerar la frustración, desarrollar una competencia sana, etc. Hay momentos en los que uno tendrá que ganar y perder, por lo que es la oportunidad perfecta para ayudarles a controlar sus impulsos y que se deben respetar las normas de juego.
Autora: Dra. Mariana Labbé T.
Psiquiatra Infanto-Juvenil.